El 13 de septiembre de 1939 se inaugura la vida de comunidad en Villa Pilar. Hacía tres años que Ángel había muerto y ahora se iniciaba una gran obra, comenzaba la Congregación de las Hermanas Apostólicas de Cristo Crucificado el mismo día que Ángel murió, ese era el deseo de María. La sangre de los mártires habría de ser semilla de cristianos.
Nuestra parroquia se une a esta festividad y a la Exaltación De la Cruz que celebramos mañana 14 de septiembre y donde la comunidad renueva sus votos.
Oramos por esta gran comunidad al servicio de los más pobres y del pueblo.
“Todo a mayor gloria de Cristo Crucificado”
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